Tucumán tiene todo, eso ya se sabe. Cuna de la independencia del país, patria de una cultura riquísima y poseedora de los paisajes más exuberantes y contrastantes de la Argentina, es también un destino ideal para liberar la adrenalina que tenemos dentro.
Una de las mejores opciones para vivir la aventura en primera persona es la tirolesa y Tucumán tiene el privilegio de contar con la más larga del Norte Argentino e incluso una de las más extensas del país. Se trata de un viaje de 500 metros sin parar que llega a alcanzar los 50 kilómetros por hora y que te permite sentir la emoción de volar como un pájaro por los cerros tucumanos a más de 50 metros de altura.
Un párrafo aparte se merece el marco inigualable en el que se vive la travesía, en el paisaje paradisíaco de San Javier, a solo media hora de la capital a través de una ruta que cautiva con su verde exuberante y que permite ir descubriendo miradores de la ciudad en cada nueva curva.
Este viaje aéreo que tiene su origen en aquel peculiar medio de comunicación que existía entre los habitantes del Tirol en Suiza es un complemento perfecto de toda la oferta para disfrutar en la villa turística que tiene como protagonista al Cristo Bendicente, obra cumbre de Juan Carlos Iramain, que corona el cerro.
Si querés vivir esta experiencia en San Javier o bien volar en una tirolesa sobre el espejo de agua de El Cadillal, podés encontrar más información en el perfil de Instagram @sw_tucuman_aventuras. Además, sumergida en la naturaleza de El Corte se encuentra otra de las tirolesas de Tucumán, en el Parque Aéreo Raki que ofrece un sinfín de actividades para vivir la adrenalina al máximo en una jornada a pura diversión.
Tucumán tiene todo, eso ya se sabe. Cuna de la independencia del país, patria de una cultura riquísima y poseedora de los paisajes más exuberantes y contrastantes de la Argentina, es también un destino ideal para liberar la adrenalina que tenemos dentro.
Una de las mejores opciones para vivir la aventura en primera persona es la tirolesa y Tucumán tiene el privilegio de contar con la más larga del Norte Argentino e incluso una de las más extensas del país. Se trata de un viaje de 500 metros sin parar que llega a alcanzar los 50 kilómetros por hora y que te permite sentir la emoción de volar como un pájaro por los cerros tucumanos a más de 50 metros de altura.
Un párrafo aparte se merece el marco inigualable en el que se vive la travesía, en el paisaje paradisíaco de San Javier, a solo media hora de la capital a través de una ruta que cautiva con su verde exuberante y que permite ir descubriendo miradores de la ciudad en cada nueva curva.
Este viaje aéreo que tiene su origen en aquel peculiar medio de comunicación que existía entre los habitantes del Tirol en Suiza es un complemento perfecto de toda la oferta para disfrutar en la villa turística que tiene como protagonista al Cristo Bendicente, obra cumbre de Juan Carlos Iramain, que corona el cerro.
Si querés vivir esta experiencia en San Javier o bien volar en una tirolesa sobre el espejo de agua de El Cadillal, podés encontrar más información en el perfil de Instagram @sw_tucuman_aventuras. Además, sumergida en la naturaleza de El Corte se encuentra otra de las tirolesas de Tucumán, en el Parque Aéreo Raki que ofrece un sinfín de actividades para vivir la adrenalina al máximo en una jornada a pura diversión.
